Como ocurre cada 25 de noviembre, se realizó la marcha que más personas convoca, después de la del Día de la Mujer.

Este año, La Red contra la Violencia Domestica y Sexual y la Intersocial Feminista, organizaciones que integra Mujeres de Negro, realizaron una marcha por 18 de julio, desde Plaza Independencia hasta la Intendencia de Montevideo.

En dicho marco, la Red emitió una declaración a través de la cual “reedita sus demandas al Estado de máximo cumplimiento de los derechos de las mujeres uruguayas, en especial los relacionados contra la violencia que se ejerce de muchas maneras contra mujeres y niñas, niños y adolescentes”.

Remarcan que si bien sus reclamos lo plantean todos los años “porque siguen siendo derechos pendientes, muy bien escritos y vigentes en el papel, pero poco y mal aplicados”.

Cuestionan que las autoridades actuales y futuras “hablan de un necesario ‘cambio cultural’, pero nadie, ningún partido, ningún candidato, adelantó una palabra sobre los contenidos de esas frases tan promisorias pero tan vacías de contenido”.

A la vez, remarcan que los cambios culturales “no se operan con menciones oportunistas, se producen a través de cambios, hechos nuevos, que producen nuevas realidades y nuevos mensajes a la sociedad”.

“Las prácticas institucionales que se aferran a prácticas históricas y valores obsoletos, incumplen sus obligaciones y son componente principal del no cambio cultural. Confirman los prejuicios, aseguran que todo siga como está, haciendo lo que siempre se hizo, aun contradiciendo leyes nacionales y convenciones internacionales”, expresan.

Aseguran que un ejemplo de ello es el Poder Judicial donde año a año “se repiten actuaciones inaceptables que perjudican los derechos de mujeres y niñas, niños y adolescentes”.

“Las denuncias de maltrato y abuso sexual a niñas, niños y adolescentes aumentan cada año mientras el Poder Judicial insiste en desvalorizar los testimonios en función de sus valores y creencias personales, y muchas veces interpreta arbitrariamente, sin pruebas objetivas, que han sido manipulados por sus madres. O por mujeres que mienten e inventan denuncias para perjudicar a su pareja”, denuncian.

Por otro lado se destaca que “también son más visibles las situaciones de acoso y abuso sexual laboral, así como las respuestas mínimas e inadecuadas a las denuncias, que confirman la desprotección de las mujeres también en ese campo”.

Reclamos
En consecuencia, la Red Uruguaya Contra la Violencia Doméstica y Sexual reitera su exigencia de otorgar recursos para la plena aplicación de la ley 19.580 (Violencia hacia las mujeres basada en género) y la adecuación de los servicios del Poder Judicial a las necesidades y capacitación permanente para actualizar la gestión de los jueces, defensores y fiscales e integrar la perspectiva de género en las prácticas judiciales, así como Defensoría Pública efectiva a mujeres y niñas, niños y adolescentes, que asesore y apoye adecuadamente en cada caso”.

Reclaman que se debe adjudicar recursos necesarios para reforzar el sistema de respuesta a la Violencia de Género de modo que INMUJERES pueda trabajar con las victimas con la frecuencia adecuada a cada caso.

También plantean la necesidad de asegurar los recursos del INAU para atender a pleno el maltrato, la explotación sexual comercial el abuso sexual infantil-adolescentes, que habilite una vida libre de violencia a los niños, niñas y adolescentes a su cargo.

Se refieren a la coordinación del Poder Judicial, Ministerio del Interior y Fiscalía para “intervenir con perspectiva de género en forma conjunta, coordinada y oportuna.

La coordinación del Poder Judicial, fiscalías, Ministerio Interior y los servicios de atención para que actúen en forma coordinada y sumando esfuerzos, es otro de sus planteos.

A la vez, proponen intensificar las actividades tendientes a sancionar y erradicar la trata de personas en todo el país, y enfrentar el acoso laboral y el acoso sexual a las mujeres en los espacios de trabajo.

Fuente: Marca País