“Es necesario realzar la política de Uruguay hacia la Antártida, lograr un mayor compromiso y participar más efectivamente en los organismos del tratado internacional sobre esa zona”, advirtió el director de Secretaría del Instituto Antártico Uruguayo (IAU), Albert Lluberas. “El conocimiento es imprescindible para promover el desarrollo de actividades científicas continuas, con nuevos investigadores y en nuevas áreas”, agregó.
El acuerdo entre 52 países sobre la Antártida, entre ellos Uruguay, incluye entre sus objetivos la promoción de medidas, así como decisiones para la administración de ese continente que involucra aspectos jurídicos, políticos, logísticos y tecnológicos.
Lluberas, en entrevista con la Secretaría de Comunicación Institucional, explicó que existen dos objetivos, uno referido al área de influencia continental y otro propiamente con el sistema del tratado internacional. Por un lado es necesario consolidar y ampliar la participación de nuestro país como operador oficial y, por otro, lograr una articulación efectiva.
“Es necesario realzar la política antártica nacional, lograr una mayor concientización y participar más efectivamente en los organismos” del Tratado Antártico, apuntó. Otro de los aspectos fundamentales en los que indicó que se debe trabajar es en la educación.
“Generar compromiso y cultura”, subrayó. «El conocimiento es imprescindible para promover el desarrollo de actividades científicas continuas, con nuevos investigadores y en nuevas áreas», agregó.
El jerarca recordó que en octubre se cumplieron 30 años de la admisión de Uruguay como Miembro Consultivo del Tratado Antártico.
Solo 29 de los 52 países que integran ese acuerdo tienen el estatus de consultivo, lo cual ubica a Uruguay en un contexto de privilegio mundial.
En 1980 el país fue aceptado, en una primera etapa, como miembro adherente al Tratado Antártico, lo cual determinó que entonces se iniciaran las gestiones para la instalación de la Base Científica Antártica Artigas (BCAA).
La Base Artigas fue finalmente fundada el 22 de diciembre de 1984, con la llegada de un contingente de científicos y personal del IAU. Fue el corolario de visitas anteriores y estudios previos con ese objetivo.
Con respecto a los desafíos del IAU, Lluberas admitió que los requisitos de especialización en cuanto a la protección del ambiente son cada vez más exigentes. “Nuestra participación debe ser cada vez más efectiva”, reflexionó.
Otro de los temas en los que Uruguay debe participar es el relacionado a los recursos naturales que posee la Antártida.
Lluberas recordó que existe una prohibición absoluta de extracción de recursos naturales. “Toda actividad relacionada con los minerales está prohibida, salvo la investigación científica”, informó.
En cuanto a los recursos marinos vivos, existe una comisión de conservación que establece distintas áreas para realizar actividades de pesca exploratoria, especialmente del krill o la merluza negra que es una especie de alto valor comercial.
Campaña de verano 2016
La campaña de verano 2016 comienza con la partida del primer vuelo de un Hércules C130 de la Fuerza Aérea Uruguaya y con la travesía del Buque ROU 26 “Vanguardia”, de la Armada Nacional, que sale del Puerto de Montevideo con destino al continente antártico.
El principal objetivo es trasladar los insumos que necesita la Base General Antártica Artigas para poder operar a lo largo del año, ya que el barco realiza este viaje una sola vez por campaña.
En esta oportunidad, la tripulación estará integrada por 72 personas y se trasladarán 40 toneladas de víveres y repuestos, 250.000 litros de gasoil antártico para generación eléctrica, servicios, y funcionamiento de los vehículos.
Lluberas agregó que entre los cometidos que tiene esta misión, se encuentra la vigilancia sobre la pesca ilegal de buques que se encuentran en la zona delimitada por el Tratado Antártico, así como también algunas actividades científicas, estudios meteorológicos, relevamiento hidrográfico y tareas oceanográficas que se realizan a bordo.
Fuente: Presidencia – Foto: grupo346.com.uy
