El cantautor uruguayo Jorge Drexler obtuvo cuatro nominaciones en las principales categorías con su más reciente disco Bailar en la cueva. También “Calle” el disco de la cantante Mónica Navarro compite como mejor álbum de tango.

“Bailar en la cueva” marcó un cambio profundo en la manera de hacer discos para Jorge Drexler, que en esta oportunidad, decidió darle rienda suelta a su perfil más rítmico con la intención de colarse en las pistas de baile. El experimentado cantautor figura en cuatro de los segmentos principales, incluido el de Álbum del año que lo pone en competencia con Marc Anthony, Rubén Blades, Calle 13, Camila, Paco De Lucía, el trío Lila Downs, Niña Pastori y Soledad, Fonseca, Jarabe De Palo y Carlos Vives.

El uruguayo también figura en Grabación del año, Canción del año por su dúo con Ana Tijoux en Universos paralelos y Mejor álbum cantautor (donde compite con Viaje de Ricardo Arjona, Bohemio de Andrés Calamaro, Renacimiento de Pablo Milanés y 8 Lunas de Rosana).

En comunicación con El País desde la ciudad de Reynosa, en México, donde actualmente realiza una gira, manifestó su alegría. «Es muy lindo que te nominen, me siento muy orgulloso. Venimos de un país muy chico y los Grammy obedecen a una cuestión geopolítica, basta con ver la cantidad de categorías específicas que hay de Brasil, México, Colombia y España. Tener presencia en México es capital para estar en los Grammy, si te va bien ahí tenés más posibilidades de que te vaya bien en la gala».

Después de haber ganado un Oscar, según su percepción «de la manera más injustificada y paradojal» como debut en las grandes premiaciones, Jorge Drexler no perdió la capacidad de asombro. Pero haber empezado así hace que diga «bueno, ya está, es como el título de médico, ya lo tienen mis padres, ya estamos todos contentos, ahora puedo seguir haciendo lo que quiero con mi vida. Ya hemos cumplido con el casillero del prestigio ahora hagamos lo que realmente nos gusta que es hacer canciones».

En México, donde lleva adelante un intinerario abultado de conciertos, asegura sentirse «feliz y querido». En Monterrey lo que más le sorprendió es que los asistentes al show conocieran más el repertorio de Bailar en la cueva que sus discos anteriores. «Es muy curioso, se sabían el rap de Ana Tijoux en Universos paralelos, que a nosotros nos llevó más o menos treinta conciertos aprender de memoria. Eso es una prueba de cariño».

El uruguayo destaca que Bailar en la cueva compite con discos de colegas «que se mueven en otro ámbito, de otra logística y otra dimensión de producción», porque él aunque pudo haber escogido trabajar con productores del mainstream decidió ir en busca del circuito alternativo de Colombia. «Fue un proceso realmente artesanal, no fuimos a buscar un nombre, un marketing, sino un sonido», concluyó.

Tanguera

Aunque la excantante de La Tabaré, Mónica Navarro, nació en Argentina, su tercer álbum solista Calle, fue gestado en Uruguay y publicado por el sello local Bizarro. Con este trabajo se ubicó en el rubro de Mejor álbum de tango junto a Rubén Blades, Carlos Franzetti, Tanghetto y Marianela Villalobos. La intérprete habló con El País desde Seúl, Corea, donde está representando a Uruguay en la celebración del 50 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas con Corea, acompañada por el pianista Horacio Di Yorio.»Es increíble estar acá (en Seúl), conviven la tradición más absoluta y la historia con una ciudad que parece sacada de una película futurista y el paisaje es magnífico», dijo antes de narrar cómo recibió la noticia sobre su nominación.

«Terminamos de tocar y estábamos con Horacio en el camarín. Me entra un llamado de mi productora y me sorprendió, pero pensé: ‘si llama ella es porque pasa algo muy bueno o muy malo’. Cuando me lo dijo lo del Grammy quedamos paralizados. Por suerte la embajadora nos prestó el celular para confirmar si todo era verdad y volví a llamarla para chequear».

Navarro envió este año su material para ponerlo a consideración de la Academia por primera vez. ¿Por qué no lo hizo antes? «¡Simplemente porque se me ocurrió ahora!», respondió con una gran sonrisa. Para ella «los discos son una fotografía del corazón de ese momento puntual» y Calle es considerado como «un hijo» por eso lo vive «como una maravilla y como una herramienta de la magia». «Calle -continuó- es la excusa para ser feliz, para juntarme con mis compañeros, para hacer cosas que tengan que ver con el más profundo sentido de vivir». La cantante, que libró una dura batalla contra el cáncer de mama, asegura estar hoy «espléndida y de alta» y espera viajar para la gala que se realizará en Las Vegas. «¡Ahora tendré que ver si consigo dinero!», bromeó.

«Debo tener el peor índice dentro de los ternados»

Jorge Drexler recuerda haber estado nominado a los Grammy Latinos unas veinte veces, pero hasta ahora siempre se fue con las manos vacías. «Debo tener el peor índice dentro de los ternados entre nominaciones y victorias», bromeó el ganador de un Oscar y un Goya.

Actualmente está dedicado a girar por México y no descarta el año próximo volver a tocar en el Interior de Uruguay. Por delante no tiene muchos proyectos. «Ni me planteo qué voy a hacer después, estoy muy contento de no tener que hacer otro disco por un tiempo. No tengo la necesidad de decir nada nuevo, tengo la necesidad de tocar y conocer mundo». Aunque componer canciones es uno de los ritos artísticos que más disfruta encuentra ciertas ventajas en las giras: «Este trabajo es muy sencillo porque estás en modo ‘on y luego en off’.

Esa es la alternancia». En el período de composición, en cambio, «estás como dos meses con una especie de zumbido interior que no te deja descansar del todo y te metés en un viaje frenético de búsqueda».

Fuente: El País