Uruguay fue destacado por ONU como pionero en hacer cumplir normas para eliminar la pesca ilegal en aguas internacionales. Desde ahora, todo barco de esa actividad que atraque en puertos nacionales debe tener el permiso de Recursos Acuáticos, la dirección con potestad de solicitar posiciones satelitales a embarcaciones considerados riesgosos. “Refuerza el control jurisdiccional y competencia desleal”, aseveró Daniel Gilardoni.

“Uruguay demostró compromiso para combatir un flagelo que afecta a los recursos pesqueros y al comercio por la competencia desleal que deriva de la pesca ilegal con condiciones laborales deplorables”, señaló Gilardoni en entrevista con la Secretaría de Comunicación Institucional.

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) distinguió a Uruguay por ser pionero en el control de la pesca ilegal y ratificar el acuerdo sobre medidas para prevenir, desalentar y eliminar la pesca ilegal, no registrada y no regulada en aguas internacionales.

Por la pesca ilegal se pierden anualmente 23.000 millones de dólares a nivel internacional.

“Con la aplicación del acuerdo todo barco que quiera entrar a un puerto uruguayo debe solicitar una autorización a la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) y presentar la documentación correspondiente”, indicó el titular de esta repartición del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca.

“Además tenemos la potestad, en aquellos casos que entendamos como riesgosos, solicitar las posiciones satelitales a los buques. Lo que refuerza el control en aguas jurisdiccionales uruguayas”, añadió.

Gilardoni detalló que Uruguay controla 100 % de los buques que ingresan a puertos nacionales con inspección documental y revisión de la licencia de pesca otorgada por el país del Estado de Bandera. También corrobora que cumpla con las condiciones fijada por la misma, los que significa, con que herramientas pesca y sobre cual especie lo realiza.

“Eso determina si el barco cumple o no”, aclaró Gilardoni, quien puntualizó que el “principal problema” en nuestras aguas se da en la frontera con Brasil, específicamente por la presencia de buques de ese país.

“Una vez que se analiza si cumple con los requisitos legales del acuerdo internacional ese barco puede entrar y realizar sus operaciones. De lo contrario se le prohibirá el ingreso que es la principal sanción porque entendemos que si no tiene puerto no puede acceder al comercio y ese es el desestimulo más grande para que sigan pescando”, afirmó.

El entrevistado enumeró que en 2015 se realizaron en el Puerto de Montevideo más de 1.500 descargas y más de la mitad fueron de barcos que fueron trasbordados en alta mar, “lo cual se entiende una situación de riesgo que puede cubrir pesca ilegal”.

Explicó que la pesca ilegal es aquella no declarada o no reglamentada y que Uruguay dispone de sanciones “fuertes” para la flota de su bandera y para la flota extranjera sanciona cuando pescan en aguas uruguayas.

“Habrá que establecer para los que pescan en aguas internacionales a que país le corresponde sancionar”, recalcó.

Fuente: Presidencia – Foto: www.nuestromar.org