La apuesta del gobierno de utilizar fuentes renovables de energía como eólica, biomasa y fotovoltaica, así como el gas natural, redujo la dependencia de Uruguay del petróleo de un 60 a 30%. Se estima que para 2030 nuestro país ya no utilizará los hidrocarburos.

El ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, participó en el foro preparatorio de la Reunión de la Alianza de Energía y Clima de las Américas, que se desarrollará en 2015. Allí Kreimerman resaltó la importancia de discutir los avances en temas energéticos, porque aseguró que ello es fundamental para la humanidad, en cuanto a suministros, costos, soberanía de la utilización de los recursos, emisión de los gases de efectos invernadero y sus consecuencias en la mitigación del cambio climático.

“Nuestras estrategias están dirigidas e integradas al desarrollo económico, social, productivo y energético y de las telecomunicaciones para mejorar la calidad de vida de los compatriotas”, dijo.

El secretario de Estado manifestó que los planes, las acciones y la exhibición de éxitos obtenidos son “imprescindibles para seguir transitando por un camino tan necesario”.

Independencia del petróleo

La implementación del plan energético comenzó en 2008 con proyección hacia 2015-2030. Dicha iniciativa permitió la modificación de la matriz energética mediante energías renovables y limpias.

En tal sentido, el objetivo del gobierno es “disminuir la dependencia del petróleo a través de la instrumentación de energía eólica, biomasa, fotovoltaica y gas natural.

Kreimerman aseguró que Uruguay disminuyó el uso del petróleo de un 60 a 30 % en los últimos cinco años y que para 2030 “será prácticamente nulo”.

“Todas las políticas implementadas tendrán continuidad en el próximo gobierno, porque además de ser un tema de Estado, Uruguay es referente en la región en la manera de modificar la matriz energética”, sentenció Kreimerman.

Fuente: La República