Hubo 10 millones de descargas de producciones uruguayas en 2014.

«División Especial Detectives», «Hidden Express», «Kingdom Rush». Estos son solo algunos de los tantos videojuegos uruguayos que han tenido unas 10 millones de descargas durante 2014, según una encuesta realizada por la Dirección Nacional de Telecomunicaciones (Dinatel) a la que accedió El País.

Los datos, que serán presentados en una conferencia internacional el próximo 8 de diciembre, muestran un crecimiento de más del 100% en las descargas respecto a la encuesta realizada en 2013.

Si bien no hay datos específicos de cuántas descargas logró cada uno de los videojuegos, se sabe que los de las empresas Ironhide y Kef Sensei fueron descargados más de 5 millones de veces; los de Trojan Chicken entre 1 y 5 millones; mientras que los de Batoví y Ballpit Monster tuvieron entre 500.000 y 1 millón.

El que ha tenido mayor cantidad de descargas ha sido Kingdom Rush, fabricado por Ironhide. Desde 2011, la empresa viene acumulando éxitos con cada una de las ediciones de la saga. De hecho, hace un año llegó a ser la aplicación paga más descargada en más de 40 países en la tienda de Apple.

«Uruguay está muy bien visto internacionalmente gracias a estos casos de éxito. Ya cuando decís que sos de Uruguay te asocian a ese caso y es algo bueno porque ven que pueden salir productos de muy buena calidad y de muy buen nivel para competir», señaló Laia Barboza, cofundadora de la empresa Pincer Games, en declaraciones recogidas por la agencia EFE hace unos días.

Desde hace una década —cuando emergieron las empresas del rubro en el país— ha habido más de 18 millones de descargas de videojuegos uruguayos.

Muchas de estas descargas no son solo por la gran demanda que existe en el mercado internacional (sobre todo de Estados Unidos y Asia). No obstante, también se debe a la gran cantidad de descargas de videojuegos del Plan Ceibal, según comentaron fuentes de Dinatel a El País.

En concordancia con la cantidad de descargas, cada vez son más las empresas que se dedican a esta industria pujante. Hoy son unas 20 compañías formalizadas las que trabajan en videojuegos en el país, en su gran mayoría microempresas. Solo hay dos de ellas que tienen más de 20 trabajadores.

Todas las firmas son de Montevideo, a excepción de una creada en Maldonado, que ya ha sido incubada y está creciendo en la capital.

Más jugadores

Al igual que en Uruguay, la región también muestra comportamientos de crecimiento explosivo de esta industria.

Newzoo, una consultora que se dedica a investigar el mercado de los videojuegos, señala que en 2017 habrá 60% más usuarios que utilicen dispositivos móviles (teléfonos y tabletas) en Latinoamérica para jugar. Este es un crecimiento muy por encima del esperado en Europa del Este (36%) o de Asia Pacífico (21%). En e1 mundo, son 1.600 millones de usuarios que se entretienen con videojuegos, según estadísticas de Newzoo.

Y es un mundo donde hay un mayor interés de parte del público femenino: según encuestas de la Asociación de Software de Entretenimiento de Estados Unidos el 54% de las personas que juegan en ese país son varones y el 46% restante mujeres.

La penetración que ha tenido Internet en los últimos años ha estimulado el interés de las personas por los videojuegos.

El último Perfil del Internauta Uruguayo, elaborado por el Grupo Radar, muestra que el 26% de los usuarios usan su teléfono para este tipo de entretenimiento.
A nivel económico, el sector mueve casi 60.000 millones de dólares por año. En 2015 se prevé un crecimiento de facturación de un 7,8%. Y, dentro de lo que son los dispositivos móviles, hay una previsión anual del 27,3%.

Formación e impulso

Para acompañar este crecimiento galopanete en el mundo, Uruguay busca estrategias para estar a tono. Por ello, en 2013 fue creada la Mesa Nacional de Videojuegos, convocado por la Dinatel y el Ministerio de Industria, Energía y Minería, cuyo objetivo es promover medidas y herramientas que favorezcan al desarrollo de este sector en todo el país.

A su vez, en Uruguay hay carreras terciarias que permiten formarse en el sector. Una de ellas es la Licenciatura de Animación y Videojuegos de la Universidad ORT.
En la Universidad de la República, la Licenciatura en Lenguajes y Medios Audiovisuales de la Escuela Nacional de Bellas Artes involucró un enfoque sobre los videojuegos.

A su vez, existen iniciativas privadas. Como por ejemplo, la academia A+, dirigida por Fernando Sansberro, quien también está al frente de la empresa Batoví.
En una industria dominada por los hombres, han existido iniciativas en Uruguay para que las mujeres también empiecen a insertarse en este sector.

Por eso, en abril se llevó a cabo el taller «Girls make games» (Las niñas hacen juegos), una instancia en la que las niñas aprendieron a utilizar los programas que permiten desarrollar videojuegos y, también, crearon un prototipo.

Ganadores del Concurso Nacional de Videojuegos

La semana pasada se llevó a cabo la décima edición del Concurso Nacional de Videojuegos. En la categoría educación e inclusión social, el primer premio fue para «Public Space», un videojuego sobre el acoso callejero que sufren las mujeres todos los días. En la categoría entretenimiento, el primer premio se lo llevó «Bebop Puzzle Beat», un juego de puzzles y acción con temática de jazz. Por haber obtenido este reconocimiento, asistirán al Game Developer Conference (GDC), el evento más importante a nivel mundial sobre el desarrollo de videojuegos que se desarrolla anualmente en San Francisco, Estados Unidos.

El jurado -integrado por Álvaro González, Leandro Mesquita y Rodrigo Pérez Haretche, tres referentes de la industria- también hizo una mención especial en la categoría entretenimiento a Soccer Bots. Se trata de un videojuego de fútbol para usuarios del Plan Ceibal, hecho por dos adolescentes.

Fuente: El País