Compañías consolidadas y nuevos emprendimientos con foco en la salud, la investigación, el agro, la educación y la logística logran un crecimiento exponencial de sus negocios o hallan nuevos mercados

La pandemia del COVID-19 ha sido desde su irrupción un manto negro que hizo desaparecer muchos emprendimientos, pero otros salieron adelante o incluso crecieron con nuevas soluciones para el mercado, como los de tecnologías aplicadas a las áreas de la salud, e-commerce, agroindustria, educación a distancia y ciberseguridad.

Aunque todavía no existen estadísticas concluyentes en Uruguay, organizaciones dedicadas al sector emprendedor, como la Agencia Nacional para el Desarrollo (ANDE), la Asociación Nacional para la Investigación e Innovación (ANII) y la incubadora Rabbit, coinciden en que gran parte de los proyectos basados en tecnología demostraron flexibilidad y resiliencia durante la crisis.

«Al ser estructuras livianas, con capacidad para cambiar sus modelos de negocios y adecuarse a las plataformas digitales rápidamente, muchos emprendimientos tienen más probabilidad de sobrevivir que las empresas más consolidas, rígidas y con funcionamiento pesado», explicó Amalia Quirici, gerente de Emprendimientos de ANDE. «En esta coyuntura, apoyamos los proyectos dinámicos, con potencial para crecer, generar facturación y puestos de trabajo rápidamente, que sean un derrame económico para el país», agregó.

Cecilia Aguirrezabala, directora ejecutiva de Rabbit -que apoya proyectos enfocados en electrónica- afirmó que los desembolsos de esta organización para apoyar a los emprendimientos han sido sostenidos, a pesar de la crisis.

Por su parte, Sara Goldberg, gerente de Operaciones de ANII (NdR: dejó el cargo el viernes 5), coincidió en que la pandemia sacudió al sector, pero que para 2021 la agencia tiene un plan operativo aprobado con montos similares a 2020. «No vimos proyectos que hayan desaparecido y los inversores tampoco lo hicieron. En algunos casos, se enlentecieron los desembolsos, pero hay empresas y proyectos que lograron levantar capital durante la pandemia y también nuevos inversores del exterior que están instalándose en Uruguay», afirmó Goldberg.

Van a más

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

Aravan Labs, que surgió en 2015 para producir insumos de control microbiológico, despegó más con la producción de insumos para la detección del coronavirus.

Según los voceros, empresas con distinta antigüedad tuvieron en la pandemia un catalizador de su negocio, así como también proyectos nuevos surgidos en estos meses.

Aravan Labs se fundó hace cinco años, pero cuando en 2020 sus socios vieron la oportunidad de crecer con la producción de insumos para el muestreo del COVID-19, les marcó un antes y un después.

La firma, dedicada a producir insumos de control microbiológico y servicios en esa área, venía creciendo, pero se potenció con la fabricación de los tubos donde se colocan los hisopos de los tests diagnósticos y los hisopos mismos, realizado con impresión 3D.

Fue así como en el último año subió las ventas un 168%. «Fue una gran apuesta. También desarrollamos la patente de un equipo que hace muestreos de aire para detectar si hay presencia -o no- del virus del COVID-19 en el ambiente, u otros patógenos», dijo Ana Laura Macció, bióloga, cofundadora y CEO de Aravan Labs. Hoy cuentan con 20 colaboradores (antes de la pandemia eran nueve) y más de 250 clientes de la industria farmacéutica, alimentaria y salud humana. «Nuestros equipos se están usando mucho en la industria frigorífica, debido a que China exige que sus proveedores realicen más controles del virus, en superficies y ambientes», acotó. A futuro, seguirán invirtiendo en innovación tecnológica.

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

ATGen. Nació en 2000 como una spin- off incubada en la Facultad de Ciencias de la Udelar. La startup biotecnológica llegó a hacer 13.000 test de COVID-19 por día.

Poner el foco en el coronavirus fue una carta ganadora para ATGen. Esta firma biotecnológica que produce kits diagnósticos para distintas patologías, tiene 20 años de existencia, pero venía arrastrando una situación financiera compleja, hasta que sus socios decidieron trabajar centrados en el COVID-19. Esto levantó a la empresa y adquirió notoriedad en el año 2020. «Tomamos la decisión de enfocarnos en COVID-19 antes de que se declarara la pandemia en el mundo. Sí habían casos de contagio, pero fue una decisión riesgosa. Cuando el 13 de marzo se declaró la emergencia sanitaria en Uruguay, ya estábamos preparados. Fuimos el único laboratorio con capacidad de dar respuesta en aquel momento», recordó Andrés Abin, químico farmacéutico y socio de ATGen.

Con ese cambio, la empresa elevó su actividad y pasó de tener diez colaboradores en 2019 a 90 en 2020, más los tercerizados. «La facturación también se multiplicó por diez», destacó Abin, sin especificar cifras. Entre sus clientes, está el Ministerio de Salud Pública, proveedores de salud, el Aeropuerto Internacional de Carrasco, Buquebus y otras empresas.

El año pasado realizaron 250.000 test de COVID-19 y fabricaron 200.000 reactivos para el Hospital Pasteur. La meta ahora es acelerar los tiempos de entrega de resultados de los tests e incorporar nuevas tecnologías.

Del agro al aula virtual

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

En abril, Soydelivery hizo 50 entregas diarias y pasaron a 2.500 por día en diciembre, en la operación que montaron para Mercado Libre, dijo Bisensang. (Foto: F. Flores)

No solo en las ramas vinculadas a la salud y la ciencia hubo crecimientos explosivos. De ello da fe Soydelivery. Esta startup que ofrece soluciones logísticas tecnológicas para envíos, cuadriplicó su facturación de enero a diciembre de 2020, hasta alcanzar los US$1,5 millones.

Contaba con 11 colaboradores al inicio de la pandemia y subió a 65 a fin de año. También aumentó la red de conductores tercerizados para la entrega de paquetes, hoy integrada por 150 personas. «Los clientes quieren recibir sus compras cuanto antes y nuestra meta es ser los abanderados en las entregas exprés. Recibir mañana, ya es demasiado tiempo», sostuvo Rodrigo Bisensang, fundador y gerente general de Soydelivery.

Para la startup Zafrales también han sido meses de crecimiento. «Nos va muy bien porque seguimos centrados en el rubro del agro, que nunca detuvo su actividad durante la pandemia. No hubo aumento en la cantidad de jornales, pero sí se mantuvo y vendimos a nuevos clientes, como Montes del Plata», contó Mauricio Pintado, cofundador de esta empresa que facilita servicios de contratación de personal zafral y temporal.

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

La plataforma Zafrales surgió en 2018 y crece de la mano del agro, un sector que no acusó el impacto de la pandemia. Actualmente tiene 40.000 trabajadores inscriptos.

Zafrales facturó en el último trimestre de 2020 entre cuatro y cinco veces más que en el mismo lapso de 2019 en la parte de personal para agro, y casi el doble en la de mano de obra para logística y carga y descarga de mercancías. La startup tiene 40.000 trabajadores registrados.

Considerando las necesidades durante la pandemia, desarrollaron un área de personal en salud, pero, contrariamente a lo esperado, no movió la aguja del negocio.

Por otra parte, el agro ha dado origen a nuevos emprendimientos. Es el caso de SRI (Sistema de Riego Inteligente), emprendimiento que surgió el año pasado cuyo software homónimo automatiza el riego para los cultivos de arroz, activa compuestas, da alertas, monitorea y sistematiza datos sobre el nivel del agua y emite reportes sobre la zafra. «El software que ofrecemos es muy demandado por ser completo. Existen algunos monitoreos automatizados en el mercado, pero no con todas las funciones de este», aseguró Víctor Castaño, fundador de SRI.

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

SRI (riego inteligencia de cultivo de arroz) se creó en pandemia como spin-off de AgroTI. Recibió el apoyo de la incubadora Rabbit y se consolidó en pocos meses.

Aún en pandemia, SRI sumó a las arroceras Samán, Coopar, Casarone y Corrales como clientes. «Queremos llegar a los países del Mercosur cuando se abran las fronteras», proyectó Castaño.

Uno de los efectos derivados del COVID-19 son las clases virtuales, un modelo que impulsó el negocio de Boki, una plataforma que funciona como un «Netflix de los niños» al ofrecer contenidos educativos y pedagógicos con base digital.

«El material digital que ofrecemos se puede usar tanto en las aulas como en las casas. En Uruguay, muchos colegios privados no detuvieron sus clases durante la pandemia, excepto algunos días», indicó Nicolás Pereira, socio de Boki.

Desde el "Netflix para niños" hasta test diagnósticos, tecnológicas uruguayas despegan en pandemia

Boki ofrece productos educativos digitales desde 2012. Crean «experiencias únicas de aprendizaje».

Sus ventas crecieron 30% en 2020, al igual que los clientes. Entre ellos, instituciones como Elbio Fernández, St. Patrick’s College, St. George’s School. Próximamente lanzarán un nuevo producto didáctico digital.

Varias líneas de apoyo a proyectos

A pesar de la pandemia, en 2020 hubo apoyos a emprendedores y pymes. Entre ellos, el gobierno otorgó diferimientos de pago de impuestos, ANDE realizó la convocatoria de Semilla ANDE, concurso al que se presentaron unos 100 proyectos, e hizo otro llamado de validación de ideas de negocios, conjuntamente con ANII, que cerró en diciembre con la recepción de 125 postulaciones (aún no se dieron a conocer los resultados). El Ministerio de Agricultura y ANII también realizaron un llamado para soluciones agropecuarias hacia fines del año pasado, como apoyo al sector, entre otras iniciativas.

Los voceros consultados para esta nota coincidieron en que surgirán nuevas oportunidades para crecer luego de la vacunación contra el COVID-19, cuando se abran los aeropuertos y mercados, dado que el éxito de las empresas uruguayas está dado muchas veces por las exportaciones, ya que el mercado local es chico y esto representa un techo.

Llega más inversión desde el exterior

Incluso en un contexto complicado para hacer negocios como el que ha impuesto la pandemia de coronavirus, hay algunas luces positivas. Específicamente en el sector de tecnología han surgido nuevas oportunidades de inversión en Uruguay, sobre todo de empresas de origen argentino, señaló Inés Bonicelli, vicedirectora de Uruguay XXI.

«Se han instalado en Uruguay y han traído sus equipos de desarrollo, que tienen como principal mercado a Norteamérica. Vienen cada vez más», recalcó Bonicelli. «También hay inversiones de empresas del sector tecnológico (de otros países) que tenían previsto instalarse en Brasil o Argentina, y terminaron desembarcando en Uruguay por la estabilidad y su ecosistema TIC (…) creo que son tiempos que nos llevan a ser creativos, a pensar fuera de la caja. Algunos de esos emprendimientos se están gestando y los veremos formalizarse y salir de la cáscara», analizó la vicedirectora de Uruguay XXI.

A su entender, los beneficios del régimen de zonas francas están favoreciendo la exportación desde Uruguay de productos de alta tecnología, y señaló que se notarán más los resultados de esa política en el futuro.

 

Fuente: El País