El profesor de la India, economista, Premio Nóbel, y galardonado con otras distinciones, Muhammad Yunus, visitó las instalaciones de República Microfinanzas de Avenida del Libertador. Allí fue recibido por algunos de los funcionarios de la institución y sus autoridades junto al presidente del BROU, economista Fernando Calloia; así como los integrantes del Directorio del Banco República.
Se trató de una charla en torno a una mesa y con pocas personas, llevada a adelante por Calloia quien puso al tanto, a esta destacada figura del crédito solidario, sobre la labor que República Microfinanzas realiza en Uruguay.
Luego fue el turno del economista y peculiar banquero indio que, como desarrollador del microcrédito, o crédito solidario, para los más necesitados en uno de los países más pobres del mundo, relató sus experiencias. Entre ellas, la baja morosidad de este tipo de crédito donde los beneficiarios de los préstamos son los dueños del Banco.
“El crédito solidario, concedido a aquellos que nunca habían pedido un préstamo, refleja el enorme potencial sin explotar que tiene cada ser humano”.
Nacido en Chittagong en 1940. Obtuvo el doctorado y posteriormente fue profesor en Tennessee (Estados Unidos). Regresó a Bangladesh en 1971 cuando ya se había independizado y la hambruna continuaba.
En 1976 consiguió vencer todas las resistencias y rechazos de entidades bancarias y logró fundar el Banco Grameen (banco rural) que, en 1983, obtuvo el estatus de banco autónomo. Esta entidad, conocida como banco de pobres “ha beneficiado a más de siete millones, dueñas ellas mismas del banco. Una gran mayoría compuesta por mujeres que, en grupos de cinco, o más, reembolsan 9 de cada 10 de sus pequeños préstamos. Es bajísima la morosidad que tenemos” comentó.
Mujeres principales beneficiarias
En la charla, el Doctor Muhammad Yunus, explicó la importancia que el Banco le da a la mujer, ya que cuando una “mujer obtiene ingresos por su actividad, sus hijos se benefician y eso reduce el nivel de pobreza”.
“Fomentamos el autoempleo y la generación de empleo a otra gente – dijo- en un lugar como Bangladesh, que no tiene una economía muy grande y es muy difícil encontrar trabajo”.
Yunus explicó que “las seis sucursales existentes se auto sustentan, el 100% del dinero que se da consiste en el capital de la empresa y que la idea es que puedan generar ganancias”.
En virtud de su éxito, el modelo del Banco Grameen, se está replicando en otros continentes, señaló el banquero. En América Latina mencionó a países como Colombia, Guatemala y México, entre los que se encuentran trabajando hace años.
El 13 de octubre del 2006, Muhammad Yunus y su Banco Grameen recibieron el Premio Nóbel de la Paz 2006 por su lucha para lograr una economía justa para las clases pobres. Este premio le dio un total de 1.100.000 euros que destinó a obras sociales.
Fuente: Portal TodoElCampo