La puesta en funcionamiento del Muelle C de la terminal fluvial de Montevideo, prevista para fines de noviembre, contribuirá a descongestionar la operativa de buques provocada por el inicio de la temporada de buques cruceros, alentó el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz. Una vez inaugurado esta parte se incrementará en 12 % la disponibilidad portuaria de la capital uruguaya.

“Con el Muelle C tendríamos fecha de entrega (por parte del consorcio Solentanche Bachy France-Saceem-Dredging International N.V.) a fines de noviembre”, adelantó Díaz a la Secretaría de Comunicación. Su construcción comenzó en septiembre de 2011 y cuando finalicen las obras habrá demandado una inversión de 100 millones de dólares.

El muelle se encuentra ubicado al este del B, en las proximidades de la calle Río Branco, donde se erigían los clubes Montevideo Rowing y Nacional de Regatas. Consiste en un nuevo puesto de atraque público multipropósito (carece de especialización de carga) de 360 metros de longitud.

Esta obra de gran porte permitirá atender buques portacontenedores, graneleros, ro-ros (transporte de vehículos rodados), pesqueros y eventualmente buques cruceros. Incluye un área adyacente pavimentada de cuatro hectáreas, ganadas al mar, para la operación y almacenamiento de mercadería y la circulación de vehículos.

“Si alguien va ahí ahora lo que ve desde tierra es mucho movimiento de trabajo”, expresó Díaz. “Hoy buena parte del muelle ya se podría utilizar y hay otro sector que se está pavimentado”, añadió.

“Hubiéramos querido recibirlo en julio, pero la entrega se dilató debido a que “un buque golpeó uno de los pilares y esto atrasó las obras, indicó el jerarca en artículo publicado el 5 de septiembre.

“Se dio intervención a la empresa aseguradora y hasta que ésta no confirmó que cubría los daños y que estaba de acuerdo con la solución técnica planteada la construcción de la cabecera del muelle se enlenteció”, agregó entonces.

Buques con vehículos rodados

Díaz expresó que el Muelle C deberá comenzar las operaciones antes de fines de año porque significaría “una gran ayuda” para el desarrollo de la temporada de cruceros que “satura” de naves los puestos de atraque.

“Esto no significa que necesariamente enviemos un crucero allí, pero si nos libera muelles para poder enviar un granelero o un ‘conteinero’”, aclaró.

El jerarca portuario explicó que nuestra regla con los cruceros es adjudicarles como primera opción los muelles 1 y 2 que son muy aptos para el descenso y ascenso de pasajeros pero no para subir las provisiones.

La segunda opción son los atraques 3, 4 y 5, donde la comodidad de los pasajeros es muy buena, pues allí hay suficiente espacios para la maniobra de los autobuses y queda una zona apta para proveeduría pero, a su vez, son muy requeridos por los conteineros.

Por lo tanto, “disponer de otro muelle nos daría la ventaja de poder operarlo para la carga”, valoró.

Díaz anticipó que “la primera operación del Muelle C va a hacer con buques ro-ro porque se descargan rápido, nos permiten bajar la rampa, usar la explanada y es un negocio que viene creciendo”.

Una vez inaugurado el Muelle C se habrá incrementado en 12 % los muelles disponibles en el Puerto de Montevideo. Esto ayudará a descongestionar la actividad y reducir los tiempos de espera de los barcos que arriban a la principal terminal portuaria.