Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón tuvieron su festejo con la militancia de la coalición multicolor en Kibón. También recibieron la visita de un par de adherentes al Frente Amplio, saludados por la multitud y por el presidente electo

En un mediodía caluroso, que provocó que cuatro veces se debiera suspender la oratoria para pedir asistencia médica, la coalición multicolor liderada por el Partido Nacional celebró la confirmación de la elección de Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón como presidente y vicepresidente para el período 2020 – 2025.

El acto se realizó en Kibón tras la postergación de ayer viernes por lluvias.

La primera en hablar fue Argimón. Tras agradecer “de corazón” esta “auténtica fiesta de la democracia y del Uruguay para todos”, la futura vicepresidenta alentó “un camino por un Uruguay unido”.

“Ese es el más claro mensaje que recibimos”, afirmó. Argimón confirmó su “compromiso por el ejercicio auténtico de los derechos” de las mujeres y su afán de que no exista “ninguna forma de discriminación”.

Antes de dejar el micrófono, Argimón dijo: “vamos a tener un gran presidente”.

Entonces fue el turno del presidente electo que dedicó la mayor parte de su discurso a destacar el clima democrático en el que se han vivido estos días en Uruguay.

Casi como un sello a ese mensaje, cuando ya estaba avanzado el discurso del presidente electo, un grupo de personas ingresó en la multitud congregada en Kibón portando dos banderas del Frente Amplio y un cartel que decía: “Felicitaciones. Si les va bien, a mí también”.
Lacalle saludó esa visita y pidió un aplauso para “el ciudadano frentista” que acompañaba la reunión. La militancia de la coalición que en varios momentos del acto coreó “se terminó el recreo”, aplaudió y celebró con un «¡Uruguay, Uruguay!».

En su discurso, Lacalle destacó la espera de cuatro días por los resultados oficiales que se dio “en paz”. “Esto es lo que tenemos que cuidar”, dijo en referencia a la “construcción democrática” uruguaya.

“La democracia nuestra se construye en nuestro lugar de trabajo donde convive un frentrista con un militante nuestro. En la familia”, afirmó.

“Eso no pasa en otros lugares del mundo”, destacó.

El presidente electo prometió “un gobierno que ejerza la autoridad, justo y con sensibilidad social” y reiteró conceptos de la campaña electoral como que “se terminó el esfuerzo del pueblo para sostener malas administraciones”.

Lacalle Pou dedicó una parte de su discurso a la seguridad pública y señaló que le duele “ese relato que dice que la sociedad en que vivimos solo tiende a ser más violenta. Tenemos que asumir el deber de que se pueda vivir en una sociedad más pacífica”.

“El gobierno tiene que ser claro en el ejercicio de la autoridad. Se le termina la impunidad a la delincuencia sea del tipo que sea”, dijo y reiteró que será él quien esté al frente de la seguridad pública.

El discurso se cerró con la invitación a subir al escenario a los tres hijos del presidente electo. La esposa de Lacalle Pou, Lorena, ya estaba con el resto de los dirigentes.

“Me han hecho un hombre feliz. Soy un hombre feliz de poderme dedicar a la tarea más importante que es cuidar y proteger a mi país”, dijo el presidente que asumirá el primero de marzo.

Fuente: 180.com.uy