El 10 de marzo de este año el cantautor uruguayo Alfredo Zitarrosa habría cumplido 80 años. Este aniversario sirve de excusa para reunir en el Estadio Centenario a músicos y cantantes de la talla de Joan Manuel Serrat, Jorge Drexler y Liliana Herrero, entre muchos otros.
El periodista y escritor uruguayo Gabriel Peveroni, escribió acerca de este encuentro:
«Un aniversario es, ante todo, un momento más que necesario de celebración. Hay mucho de ritual, de transmisión de emociones, de conocimiento, de cultura en movimiento, de rueda girando a través de nuevas generaciones que son testigos del hechizo…—en el caso de un cantautor como Alfredo Zitarrosa— de un cancionero clásico, poderoso y único-.
Alfredo, a sus 80 años, sigue encantando con su voz, desde su voz, cuando suenan los surcos de sus primeras grabaciones en los años sesenta, o golpean las profundidades del notable poema-canción «Guitarra negra».
Ha escrito varias de las mejores páginas de la canción popular uruguaya, además de patentar un estilo inconfundible en la milonga. «Porque después de Zitarrosa, la milonga ya no es la misma», como escribió alguna vez Mario Benedetti.
Locutor de emisoras radiales, periodista de Marcha, poeta premiado en 1958 por su libro «Explicaciones», cuentista dolido en «Por si el recuerdo», es uno de los mayores creadores de la música popular uruguaya del siglo veinte. Lo es, porque canciones como «Stephanie», «Adagio a mi país» y «Pa’l que se va», entre otras, siguen estremeciendo a quien las escucha. Porque en ellas comparece la poesía cotidiana y áspera. Y porque —al decir del también poeta y periodista Raúl Forlán Lamarque— «Zitarrosa fue un hombre a la medida de sus obsesiones y de sus desafíos; tenía el mérito de la pluralidad y acaso, la mejor canción o milonga que escribió, es que su obra sigue entrañablemente viva».
El 10 de marzo de 2016, Alfredo cumple 80 años. Sus canciones volverán al Estadio Centenario, el mismo escenario que lo recibió a la vuelta del exilio.
Esta vez lo hará acompañado de colegas músicos y cantantes que estarán allí para interpretarlo, para devolver la magia de Alfredo a un pueblo que no lo olvida, que lo mantiene vivo en la memoria colectiva. Algunos fueron sus amigos entrañables y llegaron a compartir zambas y milongas con Alfredo; otros lo conocen por grabaciones que han recorrido el Continente, de arriba a abajo, de sur a norte, del campo a la ciudad. La celebración tendrá un anfitrión muy especial: Fernando Cabrera, al frente de un equipo musical de primera”.
Fuente: Producciones Culturales
