Al disertar en la Universidad de Sofía en Japón, el presidente resaltó la estrategia que lleva adelante el país para tender al crecimiento económico con justicia social y encaminar una cultura del trabajo que dignifique a la gente.

Al término de su exposición, el presidente Tabaré Vázquez respondió una serie de consultas de los 200 estudiantes presentes en el recinto de la universidad que la católica Compañía de Jesús tiene en Tokio, cuyas autoridades le entregaron, a modo de bienvenida, un ramo de flores.

El mandatario uruguayo repasó los principios que rigen su actual Gobierno y los de su fuerza política, el Frente Amplio, desde que asumió el primer mandato presidencial en marzo de 2005. En ese ámbito, detalló la estrategia de crecimiento económico con justicia social, de las políticas públicas implementadas para ello y la atención especial a los ciudadanos que más lo necesitan.

Esos principios apuntan al desarrollo humano de todos los ciudadanos con inclusión, puntualizó.

Vázquez se refirió posteriormente a la concepción de solidaridad que rige en el sistema político uruguayo, uno de los más antiguos junto al de Gran Bretaña, y por ende en toda la sociedad, más allá de partidos y de la posición socioeconómica de las personas.

Agregó que existe en Uruguay una concepción cuantitativa de que todos podamos avanzar para lograr mejores condiciones de vida, y no que unos pocos lo hagan y otros queden atrás. Esto implica atender a quienes más lo necesitan. “Es para los uruguayos un mandato histórico”, aseguró.

Luego recordó a José Gervasio Artigas ante el auditorio de estudiantes de la Universidad Sofía de Tokio, al señalar que siempre promovía que los más necesitados sean los más privilegiados.

En este contexto, el mandatario dijo que la mejor forma de llevar adelante “esa concepción de desarrollo, que viene desde las raíces de nuestra historia”, es basándose en el crecimiento económico con justicia social.

“No podemos pensar en llevar adelante políticas públicas para lograr una mayor justicia social si no tenemos un crecimiento económico adecuado”, advirtió.

De todas formas, señaló que solo con crecimiento económico adecuado no alcanza “para que la gente en general tenga una vida mejor”.

Es necesario desarrollar políticas públicas que atiendan las necesidades de las personas, pero “no para ‘hacerle’ la vida a la gente”, apuntó.

“La labor del gobernante es acompañar a la gente y tratar de establecer herramientas que le permitan a las personas, con su trabajo, vivir mejor, reconociendo derechos y obligaciones, con la principal herramienta de política social que concebimos, que es el desarrollo y la generación de puestos de trabajo dignos, la creación de una cultura del trabajo y no el paternalismo”, aclaró.

Habló de la necesidad de ver el trabajo como acción que dignifica la vida de la gente, que le genera autoestima y no como el elemento que le permitirá llevar dinero a su casa para cumplir determinadas actividades.

Al finalizar su exposición, el Presidente Vázquez recibió el extendido aplauso del auditorio.

Fuente: Presidencia