El Informe de la Cooperación Sur-Sur en Iberoamérica 2016 destaca a Uruguay, porque cumplió con los principios promovidos por la Secretaría General Iberoamericana en materia de cooperación internacional. Destaca que nuestro país participó en 77 proyectos de Cooperación Sur-Sur. El prosecretario Roballo destacó que Uruguay comparte la acumulación que el Estado y sus funcionarios lograron a partir de la cooperación tradicional.

El «Informe de la Cooperación Sur-Sur en Iberoamérica 2016» fue presentado este lunes 8 por la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB). La Cooperación Sur-Sur Bilateral, aquella en la cual los países son tanto receptores como oferentes de cooperación, sumó casi 900 iniciativas (552 proyectos y 333 acciones) en Iberoamérica en 2014. Argentina, Brasil, México, Colombia y Uruguay destacaron como los principales de los 15 oferentes, mientras que El Salvador, Bolivia y Costa Rica, Perú y Uruguay se destacan entre los 19 países receptores de cooperación.

Según detalla el informe, Uruguay participó como oferente de 41 proyectos (7,43 % del total) y como receptor de 36 proyectos (6,52 % del total).

El prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo, participó de la actividad y subrayó que la Cooperación Sur-Sur y triangular no es incompatible con la modalidad de cooperación tradicional norte-sur. “Por el contrario se potencian”. Precisó en tal sentido que Uruguay “ha empatado la cooperación sur-sur con la cooperación tradicional.

“Uruguay en estos años, sin dejar de recibir cooperación tradicional, profundizó la cooperación sur-sur y triangular que es una expresión de solidaridad, de poder compartir la acumulación que el estado y sus funcionarios van logrando a partir de la cooperación tradicional”, sostuvo Roballo.

Uruguay ha demostrado que la cooperación hay que reproducirla de forma solidaria responsable con otros estados.

Por otra parte, Roballo indicó que en los países de renta media pueden brindar una cooperación con mucha riqueza, ya que en muchas ocasiones se adaptan de mejor manera a las necesidades de los países de renta baja y muy baja, particularmente en lo que refiere al desarrollo de capacidades.

“Las naciones destinatarias de cooperación no necesariamente la necesitan para desarrollar institucionalidad y capacidades del primer mundo, muchas veces las necesidades pasan por trabajar o desarrollar capacidades que se corresponden más con las naciones de renta media”, apuntó.

Roballo subrayó que Uruguay ha hecho un planteo importante en los ámbitos internacionales junto a Chile. Expresó al respecto que no se puede dividir a los países entre los que reciben cooperación solo hasta que logran un producto per cápita de determinado nivel.

El subsecretario de Relaciones Exteriores, José Luis Cancela, la secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan, también participaron de la presentación del informe.

Fuente: Presidencia