Ancap recibió una oferta de Bahamas Petroleum Company para la exploración de petróleo de un bloque de la plataforma marítima uruguaya.

Hace casi dos meses el mercado petrolero a nivel global exhibía precios negativos en una cotización a futuro con vencimiento próximo debido a la caída de la demanda y a que no había lugar donde almacenar el crudo. Casi al mismo tiempo, Ancap recibía una solicitud de calificación de una empresa en el proceso de Ronda Uruguay Abierta para exploración en la plataforma marítima.

La posibilidad del petróleo propio vuelve a cobrar vigencia.

El presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, dijo consultado ayer por El País que “esto significa que sigue habiendo interés en el mundo petrolero por nuestras cuencas”.

El ente comunicó ayer que “tras varias reuniones y data rooms virtuales realizados con la empresa Bahamas Petroleum Company plc, Ancap recibió en abril de 2020 una solicitud de calificación por parte de dicha empresa en el marco del proceso de Ronda Uruguay Abierta” que “habilita a las empresas a presentar ofertas por un período de cinco años. Adicionalmente, el 29 de mayo se recibió una oferta de BPC, correspondiente al área OFF-1”.

Este bloque está a una distancia mínima de aproximadamente 100 kilómetros de la costa y tiene una superficie de unos 15.000 kilómetros cuadrados.
Stipanicic señaló a El País que la coyuntura del mercado de crudo internacional, con precios históricamente bajos, puede “dificultar” el proceso y condicionar decisiones de los actores privados este año, pero señaló que “estas inversiones tienen en cuenta el largo plazo”.

En ese sentido, sostuvo que las apuestas que hacen las empresas petroleras “tienen que ver con lo que piensan o necesitan a largo plazo”.

El comunicado de Ancap, explicó que “la oferta realizada por BPC incluye como parte del trabajo exploratorio comprometido la evaluación y modelado geológico y de recursos prospectivos del área, así como el licenciamiento y el reprocesamiento de información sísmica 2D existente. BPC no tiene obligación de realizar un pozo exploratorio en el primer período de exploración de cuatro años”.

Según Stipanicic, “la oferta presentada propone estudios por encima del mínimo exigido por el Estado uruguayo y apunta a nuevas evaluaciones de la prospectiva geológica e interpretaciones de estudios sísmicos existentes, con la compra a Ancap de paquetes de información”.

Añadió que “junto con la oferta presentada por Kosmos y las propuestas para nuevos estudios sísmicos, esta es una buena noticia”.

El ente recordó que “en 2019 la empresa Kosmos Energy presentó ofertas para las áreas OFF-2 y OFF-3 (contiguas a las de BPC) y que “la firma de los contratos correspondientes a dichas ofertas se ha visto retrasada debido a la situación actual del coronavirus”.

“Esta nueva oferta de BPC, conjuntamente con las de Kosmos Energy mencionadas y los contratos multicliente que se han concretado en el último año, reafirman el proceso de reactivación de la actividad exploratoria en el offshore Uruguay”, agregó.

La Ronda Uruguay Abierta finalizó su primera instancia en mayo pasado y tendrá una segunda instancia para la que habrá plazo hasta fin de octubre para presentar una carta de interés y hasta fin de noviembre para presentar una oferta.

“En este momento Ancap se encuentra realizando reuniones y data rooms virtuales con diferentes empresas interesadas para la instancia de noviembre”, expresó el ente.

¿Cómo funciona?
Ancap explicó que “el modelo de contrato aprobado en la Ronda Uruguay Abierta es del tipo Acuerdo de Producción Compartida utilizado ampliamente en la industria, en los que los contratistas asumen todos los riesgos, costos y responsabilidades de la actividad. No hay aplicación de regalías o bonos de cualquier tipo. El período de exploración, que tiene un máximo de 11 años de duración, se divide en tres fases y las compañías podrían llegar a tener un área por seis años antes de comprometerse a perforar pozos exploratorios. El plazo del contrato incluyendo el período de explotación es de 30 años, que podría prorrogarse 10 años adicionales, de ser solicitado por el contratista por razones justificadas y aprobado por el Poder Ejecutivo”.

A su vez, “la producción se divide en tres porciones: Cost Oil, Profit Oil para el contratista y Profit Oil para el Estado uruguayo. El contratista está habilitado a recuperar el Cost Oil (costos operativos y capitales) del ingreso bruto previamente al reparto del Profit Oil”, señaló. “El Profit Oil es la parte de producción remanente luego de deducir el Cost Oil. Se reparte entre el Estado y el contratista sobre la base de una escala móvil en la que la participación del Estado aumenta a medida que aumenta la relación entre el ingreso bruto y los costos totales”, agregó.
Por otro lado, “Ancap tiene la opción de asociarse, lo que significa que, después de que se declara la comercialidad de un descubrimiento, tiene el derecho de asumir un porcentaje de participación en el desarrollo del proyecto. Dicho porcentaje varía desde un 20% hasta un máximo que también se oferta”, indicó el comunicado.

Entre 2017 y 2018 Ancap realizó la Ronda Uruguay III que terminó desierta en la licitación de 17 bloques. En la Ronda Uruguay II en 2012 se licitaron 15 bloques y se adjudicaron ocho y en la Ronda Uruguay I se licitaron 11 bloques y se adjudicaron dos. De los 10 bloques, el único que se mantiene es el 15 de Tullow Oil con Statoil de Noruega e Inpex de Japón, que obtuvieron una prórroga para analizar datos antes de decidir si hace una perforación o abandona el bloque. La francesa Total perforó el bloque que tenía asignado sin éxito.

¿Quiénes son las empresas?
BPC es una empresa de exploración offshore que cotiza en la bolsa AIM de Londres (London AIM Stock Exchange). La empresa tiene cinco áreas de exploración offshore en Las Bahamas en profundidades de agua de hasta 1.000 metros. BPC tiene planificado realizar una perforación exploratoria en Las Bahamas en el último trimestre de 2020. Por su parte, Kosmos Energy Ltd. es una compañía independiente de exploración y producción de petróleo y gas estadounidense. La compañía se centra en las áreas emergentes a lo largo de las márgenes del Atlántico. Sus activos incluyen proyectos de producción y desarrollo existentes en alta mar en Ghana, Guinea Ecuatorial y en el Golfo de México, descubrimientos y potencial de exploración adicional en alta mar en Mauritania y Senegal, entre otros.

Fuente: El País