El aumento de 3,7 % de la economía en el segundo trimestre, respecto de igual lapso de 2013, es consistente con las proyecciones oficiales de 3 % de expansión para el año, aseguró el ministro Mario Bergara. Añadió que Uruguay, cuyo producto creció por encima del promedio de América Latina, Europa y Estados Unidos, aprovechó ese desempeño en la década para abatir la pobreza, el desempleo y aumentar los ingresos de las familias.

El ministro Bergara, en declaraciones a la prensa, puntualizó que al crecimiento económico de 3,7 % en el segundo trimestre de este año, respecto de igual periodo de 2013, y de 2,0 %, en relación al mismo lapso inmediatamente anterior, están en línea con las proyecciones de 3 % de crecimiento realizadas para todo 2014.

Subrayó que este desempeño será interesante, aunque un poco menor a los años anteriores, tal como se preveía.

Las cifras divulgadas el lunes por el Banco Central del Uruguay son muy positivas en comparación con las dificultades que afrontan Estados Unidos y especialmente Europa; la situación difícil es en el resto de América Latina, como en Brasil, para cuya economía se proyecta un aumento menor a 1 %, y Argentina, que se muestra estancada.

Agregó que, en general en la segunda mitad del siglo XX, el crecimiento promedio de la economía uruguaya fue inferior a 2 %.

Consultado por la prensa acerca de la postura de los partidos políticos de oposición, quienes sostienen que Uruguay no aprovechó el ciclo de crecimiento económico, Bergara respondió que esa expansión estuvo acompañada por una diversificación de la matriz productiva y de sus exportaciones.

“Uruguay hoy le exporta bienes a más de 140 países”, destacó.

También impactó en indicadores socioeconómicos básicos, como el desempleo, que bajó de 17 % en 2003 a su mínimo histórico actual por debajo de 6 %, y la pobreza, que pasó de afectar a 40 % de los uruguayos a poco más de 10 % en el mismo lapso, detalló.

El incremento de la economía posibilitó, entonces, que los ingresos de los hogares crecieran sustancialmente y es visible por todos lados que los uruguayos tienen una mayor disponibilidad de recursos y están consumiendo muchos más que hace una década, lo cual no es un problema en la medida que se da en un marco de equilibrio macroeconómico, explicó.

Bergara destacó, además, que las condiciones financieras del Estado uruguayo mejoraron de forma sustancial y disminuyeron enormemente los riesgos. Apuntó que antes de 2005 el país debía mucho y no tenía fuentes de financiamiento.

Al respecto sostuvo: “Debíamos mucho, en el corto plazo y todo en dólares, mientras que ahora esa carga es mucho menor (la deuda neta pasó de equivaler a 70 % del producto interno bruto a 23 %) y a más largo plazo, con un horizonte de amortizaciones de 15 años”, indicó.

“Además hemos pasado a pesos los dos tercios de la deuda del Gobierno y el Banco Central está en moneda local”.

Fuente: Presidencia