A pocas horas del comienzo de la Copa América en Chile, la pasión de los uruguayos por el fútbol se manifiesta de las más diversas formas. Un clásico siempre que tiene lugar un evento futbolístico de trascendencia en el que compita “la celeste”, es el afán de todos por llenar el álbum de figuritas con las fotos de todos los jugadores de cada selección. Los coleccionistas atesoran estos álbumes de por vida, y por supuesto que el afán por conseguir la figurita “difícil”, no reconoce edades ni posición en la vida.

La siguiente nota del portal dnegocios.uy, cuenta cómo impacta en el mercado este fanatismo, y cómo se resuelven cuestiones espinosas, como por ejemplo, la ausencia de Luis Suárez en este plantel 2015.

El álbum oficial de la Copa América 2015 se lanzó a fines de marzo con bombos y platillos. Se entregaron 120 mil unidades de obsequio a través de escuelas, el stand de Panini en Montevideo Shopping, locales de Mosca y de Abitab. Otros 80 mil ejemplares llegaron, en modalidad de venta, a los consumidores a través de la distribución nacional de Durulte S.A (Portezuelo). Ya casi sin stock, los álbumes Panini siguen siendo el medio gráfico de mayor tiraje, circulación y cobertura nacional.

Para esta edición de la Copa América, la empresa prevé colocar en Uruguay unos 3 millones de sobres, según nos cuenta Claudio Lerner, director de Promarketing Uruguay y Exim Licensing Uruguay, representante de Panini y renombradas licencias internacionales. Esta cifra, a nivel internacional, posiciona a Uruguay como el país de mayor compra per cápita de sobres de figuritas en todo el mundo. No hay que olvidarse que Uruguay es el actual campeón de la Copa América, el país que mayor cantidad de veces ganó el torneo (15 Copas) y también es el país de mayor cantidad de álbumes completos, en relación a su población.

La colección del álbum se compone de 346 figuritas, que ilustran a las 12 selecciones en formación de equipo y a los jugadores más destacados en imágenes de acción. Cada sobrecito cuesta $ 15 y contiene 5 figuritas, además de una tarjeta “azul” de acceso a la colección virtual, que es un plus para los consumidores, ya que no deben pagar ningún “extra” y es una versión que hoy permite tener el álbum virtual, las figuritas y el intercambio virtuales en cualquier dispositivo electrónico.

Como novedad se suma una edición de lujo con tapa dura e interiores de papel de mayor gramaje y brillo. “Se desarrolló para un perfil de coleccionistas que valora la durabilidad en el tiempo de sus álbumes. La idea surgió el año pasado, en ocasión del Mundial, y rápidamente hubo demanda local de esta calidad de producto”. Mientras que un álbum clásico cuesta $ 50, el de lujo vale $ 200.

Lerner nos cuenta que Panini es una compañía que observa continuamente las tendencias, y si bien existe mayor interés por los álbumes y figuritas tangibles, para chicos de 8 a 18 años sería “extraño” que el producto no tuviera una versión digital. “Hoy se coleccionan figuritas en un teléfono celular” asegura. La propuesta tiene gran aceptación y resulta divertida.

Además de los jóvenes, las mujeres vienen creciendo como consumidoras del álbum. Lerner estima que su participación es del 30% del total, “coleccionan para sí mismas y de todas las edades” dice.

Sube la adrenalina

La colección de tarjetas Adrenalyn Copa América ofrece a los coleccionistas la alternativa de juegos de competencia. No sólo se trata de las imágenes de los deportistas, sino de armar “jugadas”, “intercambios” y “desafíos”, que agregan nuevos formatos de entretenimiento.

Las tarjetas se presentan en sobres que contienen 6 unidades y se venden a $ 60. La colección completa es de 240 tarjetas. Y para guardarlas, ofrecen el “coleccionador” de folios plásticos transparentes que se venden a $ 300.

¿Qué hacemos con Suárez?

Panini es esencialmente una editorial, y como tal debe tomar decisiones editoriales, como definir qué jugadores estarán en sus figuritas mucho antes que el equipo técnico de la selección nacional haga pública la nómina. La edición de este álbum se cerró sobre finales de diciembre pasado, para dar tiempo a las masivas producciones que abastecerían a todo el continente. ¿Qué hacemos con Suárez? Se preguntaron. “Luego de varios intercambios de opiniones, llegamos a la conclusión de que podría generar desinformación en el público, falsas expectativas o quizás una postura irreverente respecto a la sanción, más allá de cualquier apreciación personal. Finalmente se decidió seguir la línea editorial tradicional, si Suarez no jugaría no sería correcto que estuviera entre las figuritas” nos cuenta.

Pero el principal astro uruguayo no podía quedar fuera, así que le buscaron una vuelta de tuerca. El equipo de marketing de Alfajores Portezuelo, a cargo de Gerardo Paciel, diseñó una acción promocional complementaria al álbum, que consiste en una colección de stickers que vienen de obsequio en los alfajores. Esa promo, además de ofrecer un atractivo menú de premios, tiene como figura estelar a Luis Suárez. “De alguna forma había que resolver un tema que parecía más una cuestión de conciencia que una decisión comercial” reconcoe Lerner. Y finalmente Suárez está en el álbum de la Copa América Chile 2015. El sticker Portezuelo de Suárez es casi “obligatorio” para los coleccionistas.

Fuente: dnegocios.uy