Cómo se gestionó el abrupto crecimiento que trajeron el distanciamiento social y el cierre temporal de comercios.

Mientras que para la mayoría de las industrias y sectores productivos la pandemia significó una baja de ventas, mayor inestabilidad económica y reestructuras internas con reducción de personal, para el rubro del comercio electrónico fue un año de bonanza, consolidación y aceleración de crecimiento.

“Algunas empresas tuvieron un crecimiento de cinco o diez veces en lo que facturaban por su canal de comercio electrónico. Si en enero de 2020 me decías que lo planificara, jamás podría haber puesto estos números, son cifras que esperábamos para dos años más adelante”, dijo a Café & Negocios Guillermo Varela, presidente de la Cámara de la Economía Digital del Uruguay (CEDU).

Las medidas de distanciamiento social, la sugerencia de quedarse en casa, el cierre de los shoppings, locales comerciales y redes de cobranza, sumado a una buena penetración de internet en el país y una gran adopción de los dispositivos digitales por parte de la población, ayudaron a que el sector creciera de forma desmedida los primeros meses de pandemia.

Antonio Todino, gerente de Performance de la empresa uruguaya de comercio digital Fenicio, en un webinar organizado por la CEDU expresó: “Como las tiendas estaban cerradas y todos estábamos conectados, la web comenzó a ser el canal de venta. No se vendían únicamente productos de primera necesidad, también ropa, muebles, electrodomésticos, servicios y más”.

La pandemia les dejó claro a los directores de las empresas uruguayas que el e-commerce más que una herramienta de marketing es una necesidad.

Según Varela el desafío fue recibir en su sector a una cantidad de empresas que no tenían experiencia, “que no estaban trabajando en el mundo de la venta online, que tuvieron que hacer un aprendizaje intenso sobre la marcha”.

El punto de inflexión

Marzo y abril fueron los meses más desafiantes para las empresas del sector, debido al crecimiento abrupto de la demanda. Mercado Libre, por ejemplo, prácticamente duplicó las órdenes con envío a domicilio en una semana, según Matías Sandobal, gerente de Marketplace de la firma.

“La logística continúa siendo un desafío importante a medida que crece el comercio electrónico. Este año, tanto los vendedores como las empresas de logística hicieron frente a un aumento de la demanda sin igual y ambos superaron el desafío. Las empresas de logística continuaron trabajando sin problemas durante todo momento mientras buscaban la forma de hacer frente a una demanda de envíos que se duplicó desde marzo hasta ahora. Esto implicó incluso la contratación de más personal y equipamiento. Sin embargo, sabemos que aún nos queda mucho por avanzar en ese aspecto”, explica Sandobal.

En tanto, para Pedidos Ya, el principal reto en 2020 fue hacer frente al aumento exponencial de la demanda, sobre todo de marzo y abril.

Uno de sus cofundadores Álvaro García, explicó a Café & Negocios: “Para nosotros el 2020 fue un año muy peculiar, tuvimos un crecimiento en el negocio muy importante. Ya por las propias características de la compañía, Pedidos Ya venía creciendo todos los años a tasa de doble dígito y en 2020 no fue menor, incluso, fue más acelerado”.

El crecimiento en la adopción del servicio que tenían previsto para dentro de dos o tres años lo alcanzaron en unos meses, en muchos de los países, potenciado por las medidas de confinamiento y cuarentenas obligatorias.

Pexels

“Para 2021 reacomodamos los planes a esta nueva realidad y línea base de demanda buscando duplicar el negocio y seguir creciendo como compañía y como equipo, además de seguir construyendo tecnología para mejorar la aplicación”, agregó García.

Por su parte, Marcelo Lanfranconi cofundador y director de Paganza, señaló que su aplicación de pagos en línea “se convirtió en un servicio fundamental para que miles de familias pudieran pagar desde sus casas. Mantener el nivel de servicio con una alta demanda implicó crecer más rápido para mantener nuestra calidad y seguir innovando”.

Todo este crecimiento llegó a su punto máximo en mayo, cuando Uruguay alcanzó un hito histórico: el presidente de CEDU, Guillermo Varela, explicó que “por primera vez hubo más pagos electrónicos que presenciales, algo que no preveíamos que fuera a suceder hasta el 2023”.

Cifras significativas

“La Cámara de Economía Digital presentó un estudio en el que revela que un 52% de los uruguayos utiliza internet para comprar productos o servicios, el 42% para pagar facturas y el 34% usa aplicaciones como Uber, Easy o PedidosYa”, explicó Carolina Chacur, Business Head de Región Sur en GeoPagos, en nota de El Observador.

La misma Cámara también dio a conocer los datos del Monitor Empresarial del Ciberlunes de octubre de 2020, un estudio estadístico realizado por la consultora Factum.

Se destacó el aumento de las órdenes de compra y de las visitas a los sitios web de las 106 empresas participantes de la edición oficial de la fecha comercial.

El estudio indica que, al proyectar las ventas, estas ascendieron a aproximadamente $ 230.000.000, con un promedio por empresa de $ 2.092.367.

“Por otra parte, el 84% de las ventas registradas por las empresas durante el evento de e-commerce fueron a través de sus propios sitios web, mientras que en el 16% restante se dio mediante marketplaces. En promedio, las tiendas participantes registraron 1.032 órdenes de compra, lo que representa un aumento del 39% en comparación con noviembre de 2019”, citan en la web de CEDU.

Según el estudio, los usuarios se animaron más al uso de tarjetas de forma online para el pago de sus compras, siendo las más utilizadas las de crédito. Otros medios de pagos escogidos como preferenciales entre los usuarios fueron: las tarjetas de débito online (42%), las redes de cobranza (37%), la transferencia bancaria (25%) y el pago contra entrega (43%).

Explica Sandobal: “Para Mercado Libre, el 2020 va a terminar con un aumento de la facturación del 70%. A su vez, aumentó el índice de frecuencia de compra un 28% y el gasto promedio por usuario en un 68%. Esto significa que miles de vendedores que utilizan nuestra plataforma aumentaron sus volúmenes de venta y facturación”.

La empresa que cuenta con 570 tiendas oficiales, registró en el día pico del año 26 mil compradores que compraron 47 mil artículos, lo que da una venta cada dos segundos.

Por otro lado, en el webinar de CEDU dictado por Antonio Todino e Ignacio Castañares de Fenicio, citado anteriormente, se indicó que “la pandemia hizo que un público diferente se conectara a la web y se observó a personas de más de 55 años realizando compras en Internet, creció la confianza en aportar datos y eso permitió que algunos sitios crecieran en un 500% en su tráfico”.

Resiliencia

Un ejemplo de una rápida reconversión al e-commerce fue la del evento de moda Moweek, que tuvo que pasar rápidamente de la presencialidad a un formato digital sin perder la esencia. “Fue un desafío muy grande por el poco tiempo con el que contábamos, ya que el evento era en abril y el covid-19 llego aquí en marzo”, cuenta Carina Martínez, cofundadora y directora del proyecto. Y la transición fue un éxito: “en la primer edición 2020, en plena pandemia, se logró el mismo volumen de ventas total que en la edición anterior de octubre 2019, a pesar de no haber podido contar con todas las marcas (en lugar de 100, fueron 54)”, dice Martínez.

En la segunda edición de Moweek 2020, la facturación fue casi del doble que en la anterior y alcanzó casi el millón de dólares. “Para esa segunda edición ya teníamos desarrollado el marketplace y esta plataforma digital vino para quedarse, porque nos permite un mayor alcance, especialmente en el interior del país y para quienes no pueden ir al evento presencial”, concluye la empresaria.

Por su parte, la empresa uruguaya Tiendamía vivió un 2020 digno de una montaña rusa. Si bien el comercio electrónico está en el corazón de su negocio, al ser una plataforma de cross border con restricciones estatales —los usuarios tienen un límite de compras e importes anuales restringidos—, a diferencia de otros e-commerce sufrió sus altibajos.

Según Andrés de Miquelerena, country manager de Tiendamia en Uruguay, “el sector venía con una baja antes de la pandemia (cerca de un 10% menos con respecto a 2019) y en marzo y abril tuvimos otro gran impacto negativo. La gente empezó a achicar gastos y no tenía claro si por los vuelos seguíamos trabajando con normalidad, por lo que hubo una baja de órdenes de un 50% menos en relación a marzo y abril de 2019”.

Con este panorama la empresa tuvo que tomar medidas drásticas, que incluyeron reducción de personal.

Pero en mayo, la situación comenzó a cambiar y la empresa puso aún más foco en cumplir su misión de “democratizar el acceso a los bienes mundiales”.

Luego de mayo, con la reapertura de los locales comerciales, Tiendamia volvió a los niveles de venta similares a los de 2019.

“Se hizo muy difícil la planificación porque en el mismo año tuvimos récord mensual de ventas para arriba y para abajo. (…) El cross border en el mundo crece muchísimo y es algo que está muy limitado en Uruguay. Creo que tendríamos que dar más libertad al uruguayo de comprar productos en el exterior que no consigue localmente. Como es complementario del comercio local, creemos que tendríamos que mejorar esos aspectos del régimen”, manifestó Andrés de Miquelerena.

La empresa uruguaya, nacida en 2014 y con presencia regional, tiene el foco en expandir aún más su internacionalización en 2021 y convertirse en la mejor cross border del mundo.

“El 2021 es una gran oportunidad para seguir mejorando y además tenemos muchas expectativas para ser el próximo unicornio uruguayo”, afirma.

El paso siguiente

Para Matías Sandboal de Mercado Libre el e-commerce va a seguir creciendo y ganando mercado frente a las ventas de retail y el gran desafío es la logística. “Nos enfrentamos a un consumidor que quiere encontrar lo que busca en internet, que esté a buen precio, pagarlo con su medio de pago preferido y después que le llegue el día y que a su vez ese envío sea gratis”.
Miquelerena de Tiendamia concuerda con que los tiempos de entrega tendrán un papel fundamental en el futuro del negocio y que la automatización de los procesos —como las entregas por drones— será uno de los pasos a seguir.

 

Fuente: El Observador