Así como en su momento llegaron los cítricos uruguayos a Estados Unidos, ahora es el momento de la carne ovina desosada, la cual al ingresar al mercado estadounidense, “será una muy buena carta de presentación para ingresar con hueso a México y la Unión Europea (UE)”, reconoció Gastón Scayola, vicepresidente del Frigorífico San Jacinto, responsable de los envíos.
Para el empresario, Estados Unidos no será un mercado que cambie drásticamente la realidad de las exportaciones de carne ovina uruguaya, que sumaron 23.470 toneladas –peso canal– en 2013.
El consultor y analista Carlos Salgado estimó tiempo atrás que Uruguay podría colocar entre 1.000 y 2.000 toneladas de carne ovina en Estados Unidos.
“Estados Unidos será un jugador más y hay que estar presente y volver a recorrer los nichos de mercado que teníamos antes de la aparición de la fiebre aftosa en el país” en 2001, reflexionó Scayola, y agregó que, sin embargo, será muy importante como carta de presentación para ingresar en un par de años con carne ovina con hueso, que es más valiosa, a México y la UE”.
El vicepresidente del San Jacinto reveló que ”hay mucho interés” por la carne ovina uruguaya y reconoció que el frigorífico “está haciendo negocios” porque los mexicanos consideran que la carne de Australia y Nueva Zelanda “está muy cara”. Ambos países son los principales competidores de Uruguay en los mercados cárnicos.
Además, “a nosotros nos interesa México, que es un país con el que Uruguay tiene un acuerdo de libre comercio, y apuntamos a abastecer a supermercados del más alto nivel”.
Scayola reconoció que México “nos puede abrir el mercado para la carne ovina con hueso” y eso alberga la esperanza de colocar “cortes de cordero caros y también brindar una alternativa para la carne de animales adultos –ovejas y capones– que no disponen de mercados”.
Mientras tanto, partió el jueves el nuevo embarque con bifes, lomos y piernas de cordero premium del San Jacinto hacia Estados Unidos, adonde llegará el 13 de marzo próximo.
Fuente: El Observador