La industria alimenticia y la forestal, el comercio minorista y las telecomunicaciones atrajeron compañías de esos cuatro países.

Los países que integran la Alianza del Pacífico (Mexico, Colombia, Perú y Chile que juntos equivalen a la novena economía del mundo), representan una buena posibilidad de complementariedad comercial con Uruguay, un potencial que hasta el momento está sub explotado. Con Perú, Chile y México, Uruguay tiene acuerdos bilaterales de inversiones vigentes. Asimismo, cuenta con acuerdos de preferencias para acceso a mercados con los mismos países, además de otro con la Comunidad Andina de Naciones (por tanto, también con Colombia).

El crecimiento económico de los países que conforman la Alianza del Pacífico llama la atención a inversores de todo el mundo, al tiempo que sus empresas se han internacionalizado y crecen fuera de fronteras. Algunas de ellas han visto la oportunidad de buenos negocios en Uruguay, son verdaderos gigantes en la región y se ubican entre las primeras 40 «multilatinas», según el ranking anual que elabora la revista América Economía. Es el caso de Telmex, Bimbo, América Móvil, Sonda, el grupo Falabella o la forestal CMPC.

Profesionales vinculados a la actividad empresarial coincidieron en que es un factor relevante que empresas de esos países estén localizándose en Uruguay, ya que son nuevos jugadores regionales, que poseen capacidades operativas, financieras y comerciales; y, por otro lado, seguramente ayudarán a la expansión del comercio de productos nacionales en sus mercados de origen. Paralelamente, advierten que desde el punto de vista de las exportaciones, debería tomarse con cautela la posibilidad de pensar en esos países como plataforma de acceso a terceros mercados, dado que el cumplimiento de normas de origen impediría triangulaciones de ese tipo.

Fuente: El Pais