Los países de la Unión Europea y Estados Unidos no permiten el ingreso de ciudadanos con covid-19
Un contingente de 25 turistas de Estados Unidos y la Unión Europea, y los 80 integrantes de la tripulación del crucero Greg Mortimer, en su mayoría filipinos, cuyos países no permiten el ingreso de personas con coronavirus, deberán permanecer en cuarentena hasta que el resultado del test de coronavirus sea negativo para poder ser repatriados a su país.
El canciller Ernesto Talvi informó en su cuenta de Twitter que un ciudadano indonesio de 38 años será trasladado al Casmu para recibir asistencia médica. La Armada Nacional señaló que el hombre dio coronavirus positivo y tiene una neumonía severa con asistencia de oxígeno. Talvi agregó que de los 5 pasajeros ya internados en hospitales locales, 2 evolucionan «muy bien» y se espera que pronto sean dados de alta.
Este sábado 112 pasajeros australianos y neozelandeses que viajaban en el crucero Greg Mortimer aterrizaron en el aeropuerto de Melbourne luego de la operación de repatriación que organizó el gobierno uruguayo.
El buque llevaba a más de 200 personas, de las cuales 128 dieron positivo en pruebas de covid-19 según la naviera propietaria de la embarcación.
Los positivos de covid-19 que permanecen a bordo del crucero son controlados por médicos del Casmu y el Hospital Británico a distancia. A través de telemedicina, son monitoreados mediante teléfonos celulares, con controles de temperatura y síntomas.
Luego de aprovisionarse de agua, combustible y alimentos y evacuar residuos, el buque volvió este sábado a la zona de fondeo, a unos 20 km del puerto de Montevideo.
«Cuando la cuarentena termine los pasajeros que quedan seguramente van a poder regresar a través de lineas comerciales y la tripulación volverá al destino que tenía planeado el buque», dijo el canciller Ernesto Talvi.
La naviera informó el viernes que está trabajando en opciones de vuelos chárter para poder devolver a los europeos y estadounidenses a sus hogares cuando puedan hacerlo.
El embajador del Reino Unido en Uruguay, Ian Duddy, explicó que está «trabajando en un plan para llevar a los pasajeros británicos y otros europeos de vuelta a casa», aunque señaló que «no es fácil» y que debe «respetar los controles sanitarios» de Uruguay, escribió en su cuenta de Twitter.
Talvi informó que cinco de las ocho personas que días pasados debieron bajar del buque para ser hospitalizadas en Montevideo por síntomas graves de coronavirus fueron dadas de alta.
Entre ellas hay tres pasajeros australianos que abordaron el vuelo humanitario el viernes. Los otros son dos filipinos miembros de la tripulación que volverán al buque para hacer la cuarentena.
También permanecerán internados en la capital uruguaya una ciudadana británica y dos australianos. Estos dos últimos, un hombre y una mujer, tienen en el buque a sus parejas, que se quedaron en Montevideo.
«Con todas las garantías sanitarias, se los va a trasladar hasta el hospital para que queden acompañando a sus cónyuges. Es un momento complicado para ellos, no quisimos que se fueran cuando su marido y su mujer están aquí pasando un momento difícil y están solos», dijo Talvi.
En tanto, otros dos tripulantes filipinos fueron trasladados la noche de este viernes hacia hospitales montevideanos.
Marcelo Gilard, médico encargado de la sanidad de la operación de evacuación, dijo que son «dos pacientes en estado de gravedad importante», según información brindada por el médico del barco.
En el crucero, que partió de Ushuaia (Argentina) con destino a Las Palmas (España), viajan 132 pasajeros y 85 tripulantes, y en el puerto de Montevideo solicitó su desembarco el 31 de marzo. Al advertir la presencia de pasajeros con síntomas, la Cancillería y el Ministerio de Salud Pública aseguraron la atención médica a los viajeros, sin permitir su descenso.
Los pasajeros que llegaron el sábado deberán permanecer en cuarentena en un hotel en Melbourne y algunos fueron trasladados a hospitales locales especialmente acondicionados para covid-19.
Claire Long, hija de uno de los pasajeros repatriados que estuvo internado en el Hospital Británico, compartió en su cuenta de Twitter el video que publicó Talvi en el que se muestra a su padre arrodillado y besando el suelo uruguayo. «Estamos muy agradecidos con todos ustedes en Uruguay», dijo en Twitter.
En entrevista con SBS News, Long dijo sentirse «increíblemente aliviada». «Estamos muy agradecidos con el pueblo uruguayo (y) el gobierno uruguayo que extendió la mano de la amistad cuando realmente estaban igual que nosotros, tan asustados», expresó.
Fuente: El Observador