El Senado argentino entregó la distinción de honor post morten «Juana Azurduy de Padilla» a Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz, asesinados hace 40 años en Buenos Aires en el marco del Plan Cóndor, operativo de las dictaduras del Cono Sur de América.

El mismo día en el que se conoció la primera condena de la Justicia argentina al Plan Cóndor, los senadores uruguayos Rafael Michelini y Luis Alberto Heber recibieron la distinción “Juana Azurduy de Padilla”, otorgada por los senadores argentinos, en representación de los legisladores Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz.

Michelini y Gutiérrez Ruiz fueron secuestrados y asesinados en 1976, hace exactamente 40 años, en un operativo llevado a cabo en Argentina en el que también fueron víctimas Rosario Barredo y William Whitelaw, miembros del Movimiento de Liberación Nacional. Se cree que en el mismo operativo fue secuestrado Manuel Liberoff, militante del Sindicato Médico del Uruguay y del Partido Comunista, del que aún se desconoce su paradero.

El acto, desarrollado en el Congreso de la Nación de Argentina, fue iniciativa del senador Abal Medina, del Frente para la Victoria. La sesión estuvo presidida por la titular del Senado, Gabriela Michetti.

Además de Rafael Michelini y Heber, desde Uruguay asistieron al evento la ministra de Turismo Liliam Kechichian (que fue en nombre del gobierno uruguayo), el subsecretario de Turismo Benjamín Liberoff y el embajador de Uruguay en Argentina, Héctor Lescano, quien tomó la palabra.

Mención de Honor

La “Mención de Honor Juana Azurduy de Padilla” es un reconocimiento que recuerda a la heroína de la independencia americana, Juana Azurduy de Padilla, que combatió principalmente en el Alto Perú (actual territorio de Bolivia).

Bajo el nombre de Juana, la distinción es una figura que intenta abarcar las luchas independentistas de todo el Cono Sur de América, donde en los años 70 y comienzos de los 80 actuó el llamado Plan Cóndor. Este operativo implicó la coordinación represiva de las dictaduras de Argentina, Chile, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, responsables de miles de secuestros y asesinatos.

Fuente: La República