En la cumbre de la vitivinicultura mundial se elogió la promoción del consumo razonable e inteligente del vino y del jugo de uva.

Dos emprendimientos que se desarrollan en el sector vitivinícola de Uruguay generaron un fuerte impacto en el 36° Congreso Mundial de la Vid y el Vino y la 11ª Asamblea General de la Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV), que se realizó la semana pasada en Bucarest, Rumania, al extremo tal que en el acto de cierre de la actividad Uruguay fue especialmente mencionado por ello.

José Lez, enólogo y presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi), quien representó al país en dicha instancia y expuso las características de Uruguay como país productor, consumidor y exportador de productos de la vitivinicultura, comentó a El Observador Agropecuario que “el balance de esta participación es muy positivo, Uruguay fue nombrado en las resoluciones de la asamblea dos veces”, situación que generó mucha satisfacción.

Ello ocurrió, por un lado, en la temática de la salud, por el esfuerzo que se está desarrollando para comercializar jugo de uva promoviendo ventajas no solo para los productores e industriales, también para los niños de las escuelas públicas que acceden a un producto muy beneficioso, en un programa que se extenderá pronto a todo el territorio.

La otra mención se produjo por la campaña que se activó para promover el consumo razonable e inteligente del vino, que ha permitido que en los primeros cinco meses de 2013 la comercialización del producto en el mercado local crezca en algo más de un millón de litros en relación al mismo lapso del año anterior, llegando a los 25 millones de litros.

Añadió que un aspecto que despertó la admiración en los participantes es que en Uruguay “el vino es considerado un alimento que se consume preferentemente en familia, en el hogar, que sirve para apuntalar otros valores como los de la amistad y la familia”.

Lez, integrante calificado del Comité Científico de la OIV, dijo que los congresistas elogiaron lo que Uruguay está realizando.

Y un factor que acrecienta el valor de ese elogio es que en esta instancia “hubo una asistencia perfecta, estábamos representados los 45 países”.

Finalmente, destacó que en Bucarest se aprobaron 20 resoluciones a nivel del Comité Científico y, entre ellas, se refrendó el concepto y el valor internacional que tiene el título del enólogo, definición en cuyo marco se encuentran por sus características los enólógos uruguayos, “algo que nos dejó muy felices”.

Fuente: El Observador